Los 9 rasgos para identificar a la gente mala
Es cierto, hay gente mala y seguramente en tu vida la has encontrado. Personas
que disfrutan al causar daño, con un nivel de maldad que va desde la inmadurez
psicológica hasta la psicopatía o sociopatía.
Incluso estoy seguro de que al leer «persona mala» has pensado en alguien en
concreto de tu vida que te hizo o te está haciendo la vida imposible.
El concepto de maldad puede ser muy extenso. Ahora están más de moda
apodos como “persona tóxica” o “vampiro emocional”. Pero hay unas
características en común y quiero que aprendas a reconocerlas.
1-Niegan los hechos, aunque sean evidentes. Las personas malas son cobardes,
son aquellos que lanzan la piedra y esconden la mano, y que, además, siempre
tienen piedras preparadas. Intentarán darte una versión de los hechos, pero a
otra persona le referirán una muy distinta. Por eso, con estos tipos de personas
hay que hablar cara a cara, a la luz del sol, con testigos y registrar todo por
escrito para tener pruebas de sus mentiras.
2-No tienen sentimientos de culpa. Una mala persona siempre tiene una
justificación para sus actos, sean los que sean, y no verá maldad en ellos. En su
mente maquiavélica lo que han hecho está bien porque, según ellos, era lo
correcto.
3-Son victimistas. Se hacen las víctimas, para dar la vuelta a la tortilla y hacerte
sentir a ti como el culpable de la situación. En las relaciones de pareja pueden
llegar incluso a simular una enfermedad grave para generar empatía y atención.
4-Son controladores. No solo con los demás, sino con ellos mismos. Con los
demás controlarán lo que haces. Ahora, con las redes sociales, todos estamos
expuestos a que la gente sepa lo que hacemos. Estas personas tomarán
pantallazos de tus publicaciones para hacerlos circular con la intención de
criticarte o perjudicarte. Pero también son controladores con ellos mismos: no
se gustan en realidad, de ahí que necesiten desahogarse con otras personas y
controlar, a cada momento, la imagen que quieren trasmitir a los demás.
5-Odio sin lógica. No busques el porqué de sus actos, no tienen lógica, solo en su
mente enferma pueden tener alguna. Se frustran con facilidad, no saben
canalizar su ira, no entienden sus tristezas, no tienen inteligencia emocional. –
Tienen muchas caras. Por este motivo, no los ves venir. Se mostrarán amables
cuando les importa y les conviene, pero, en realidad, son personas que
experimentan fuertes transiciones entre intensos estados emocionales negativos
y positivos. En el fondo sienten emociones negativas como celos, ira o
agresividad.
6-Te manipulan sutilmente. Aquí necesitas una gran capacidad de observación
para ver cómo hablan y reconocer su comunicación no verbal.
7-Suelen engañar a todos. Son muy mentirosos. Pregunta a los demás sobre esta
persona sin hacerte sugestionar, porque verás que muchas veces ha utilizado los
mismos patrones con otros.
8-Son personas egocéntricas. Algunas pueden tener patrones narcisistas.
Recuerdo un ex jefe que en lugar de escucharme se miraba continuamente al
espejo peinándose o marcando bíceps. Así pues, son personas que no tienen
empatía, todo el mundo gira entorno a ellos y los demás en su órbita.
9-Son muy envidiosos. No soportan que seas más que ellos o destaques, o tengas
algo que ellos carecen.